Chicas, al salón

Domingo al mediodía, enciendo el televisor. De nuevo estoy dispuesto a desinformarme viendo algún noticiario o telediario, antes de acomodarme y sestear con la cinta, que dice un amigo mío, de las 16h.
¿Qué ocurre?
Sigo borracho o alguien se ha encargado de retroceder 4 años en el tiempo. Me froto los ojos y tras una pancarta los miembros de Nunca Mais reivindican no se qué. En un primer momento pienso que, al fin, tanta ceniza al mar les ha activado contra la Xunta amiga. Pero no. Continúan explotando El Prestige y yo que creía que lo habían tocado unos y hundido otros.
Luego me veo involucrado en pleno Process of Pis (in english), me hago cruces y descubro que la ingesta de tanto vino me ha aturdido más que otras veces.
Siguen muriendo conductores en las carreteras, que pena, ¡pero que alivio!, por que acto seguido a la sangre y a los hierros retorcidos me certifican que el año pasado por estas fechas fallecieron unos cuantos mas. ¡Será para celebrar con champán!
Ayer terminó el I Salón del Vino de Pamplona pero no ha sido noticia.
Una vez más Pamplona vuelve a dar la espalda al vino. De acuerdo, había que pagar, pero era la ocasión, muy bien aprovechada por gente joven, treintañeros, y gente madura, para conocer muchos y buenos vinos.
Hubo gente, bastante, para ser la primera vez que la capital navarra se decidía por este evento. Pero faltaron muchos, demasiados. Ya lo saben ellos y por qué.
Como el año pasado por estas fechas, en la Semifinal de la Nariz de Oro se notó que Pamplona sigue sin estar preparada para este tipo de reuniones. Por cierto, este año la semifinal a Vitoria, escarmentado el organizador después del palo.
Los visitantes fueron de calidad. Tenían interés y lo demostraban. Se les notaba, a muchos, recién iniciados pero no por eso de segunda división. Son el futuro y, por ello, merecían toda la atención que se les presto.
La organización casi perfecta, el ambiente relajado y algún vino para compartir.
Pues ni por esas. Lo tengo claro. Si, como en muchas otras ciudades, no cuelgas el todo incluido, gratis total, no hay nada que hacer. Y si para colmo no recibes el apoyo de los pesos pesados de la comunidad, me refiero a críticos, periodistas, cofradías, sociedades y personajes directamente o indirectamente relacionados con el vino, pasas casi de puntillas para el grueso de la población.
El año que viene, que lo habrá, apuesto por que las y los recogepelotas del Master Series de Tenis de Madrid vengan a recogérnoslas a nosotros. Las copas, me refiero, por que por aquí, las otras, hay algunos que las tienen muy grandes.