martes, noviembre 15, 2005

Heredad Guzmán Aldazabal


HEREDAD GUZMAN ALDAZABAL

El vino y la bodega son el resultado del trabajo de la familia Guzmán Aldazábal, ubicada en el pueblo de Navaridas en pleno centro de la rioja alavesa. Cuentan con viñedos que rondan los 50 años de edad y cuyas variedades son tempranillo, graciano y mazuelo. La condiciones climáticas, la altitud y los suelos permiten el crecimiento de las vides de forma biológica, es decir sin emplear gran cantidad de pesticidas. La crianza de los vinos se lleva a cabo en barricas francesas de Allier. Asimismo, se promueve la combinación de vinos de maceración carbónica para su envejecimiento, añadiendo matices frutales a los vinos suaves y tánicos, que son mejores para su consumo temprano pero que también tienen buenas cualidades para su guarda.
La bodega en la añada 2000, ha lanzado un vino exclusivo y complejo de nombre “Exaltación”, que aúna todos los atributos de los rioja de alta expresión. En resumen una bodega que elabora vinos de colección. Sólo elabora vinos tintos obtenidos con sus propias uvas, lo que le permite un mejor control de las vides y sus frutos. Además usan técnicas de agricultura ecológica, lo que redunda en los aromas y sabores de los vinos.
Este crianza tiene aromas muy concentrados y con predominio de los frutos rojos (frambuesas y moras), siendo en boca muy persistente. Es un vino que aguantará alrededor de diez años y que es perfecto para tomar con carnes rojas, asados de cordero, legumbres y arroces de carne.

Guzmán Aldazábal Exaltación 2001
Javier Guzmán ha sabido inspirar un rioja que rompe esquemas y que muchos no identificarán con esta zona vinícola. En nariz y en boca atesora fruta muy, pero que muy madura, que denota nobleza.
Sustanciosidad, concentración, carnosidad, negrura virtudes que, tras llamar la atención, dan paso a múltiples sensaciones: regaliz, zarzas, confitura, tostados, madera, untuosidad, tanicidad, calidez, etc. Un vino de raza vestido de gran clase. Compuesto por 80% tempranillo, 10% graciano y 10% de otras variedades; uvas procedentes de viñedos viejos con una producción de 2.500 kilos por hectárea. Crianza de diez meses en roble nuevo. Reposa en cristal desde diciembre de 2001. La producción asciende a 3.000 botellas.

Guzmán Aldazabal 2001
Tiene una enorme expresividad en nariz, a la que da gusto llevárselo y recrearse, bastante más que en boca, donde también tiene entidad, si bien más atemperada. Destacan las fragancias de fruta madura y regaliz fundidos con el aroma fino del roble. Al paso por la boca, se aprecian unos taninos suaves y una acidez matizada, que dan pie a un vino persistente y amable, si bien con buen potencial estimable, incluso de envejecimiento. Se elaboró con un 90% de tempranillo, un 5% de graciano y un 5% de otras variedades. La crianza se realizó en barricas durante un año. Su ingreso en botella data de julio de 2003.

1 comentario:

Jorge Castilla dijo...

Te esta quedando muy bien,ahora es completar con articulos buenos. Si me permites alguna sugerencia, enlazaria con alguna web del tema. Y si que pondria un contador