Fiestas de Villava

Villava is not Belfast or Hernani.

Fiestas de Villava.
Alcalde con ganas de dar que hablar.
Momento Boris o complejo de habitante de la casa gran hermano. Hambre de notoriedad.
Consigue su propósito en el chupinazo iniciador de la semana festiva.
Diarios y televisiones locales, portadas y cabeceras de noticiarios.
Periódicos y medios de comunicación nacionales sueltan su imaginación y describen una realidad virtual cercana a las mentes utópicas de nuestros vecinos de la C.A.V.
Desde Miguelón Induráin, Villava solamente salta a los medios por sandeces y delirios de grandeza de políticos de medio pelo carentes de sustancia gris y con muy mala educación, pues ponen en duda la buena fe y la honestidad de toda una población foral alejada de la política independentista y más preocupada por su rutina diaria.
No todo el monte es orégano, aunque en este caso podemos sustituir orégano por zarzas o setas venenosas.
Hoy he disfrutado de unas pochas a la navarra con todos sus sacramentos. A saber: chorizo, jamón y tocino. Importante para no iniciados, todo de primera calidad. El cerdo merecía la pena. Aromas francos, sabrosos. Nada de corralizas y grasas animales de restaurantes sacacuartos. Guindillas en vinagre para equilibrar sabores, con el justo picante.
El vino, de Falces, Navarra. Inurrieta Cuatrocientos 2006. Vino fácil, de consenso. Sin carácter pero con adeptos. Elaborado con Merlot y Cabernet Sauvignon. Para consumir en compañía. Vino de charanga, festivo. No para charlar durante horas, ni contarle intimidades. Para eso hay otros.
La Guarda de Navarra recomienda el video del post.
¡Es el resumen de las fiestas que la mayoría quiere, sin aditivos, ni conservantes!
Con calor, buen tiempo, música animada y la carpa a tope. Hasta Jaime Urrutia hubiera bajado ayer su caché ante ese gentío.