El planeta se calienta y las mentes de muchos también.
Después de tragarme on line la entrevista que Jesús Quintero hizo a José María García y que nuestra televisión pública tuvo a bien censurar, no encuentro insultos para ello. Bueno si, veo que el nuevo Butanito, transformado y sumiso al poder, nombra con rencor al anterior presidente, al del bigote. Ataca a otro expresi, al del ¡Hala Madrí! Y se acuerda “mu malamente” de quienes fueron sus amigos y la empresa que le daba de comer. Es una forma de hablar por que ganando mil quinientos kilos de los de antes no se debe tener tiempo de eso y si de otras cosillas.
Me atrevería a apostar, con quien sea, que antes de las elecciones nos colocan esa entrevista de marras consiguiendo máximos de audiencia (para eso es todo este burdo montaje, y juro que no he leído, ni oído, nada al respecto. Es mi impresión personal que para eso me crearon con cerebro) y supergarcía pasa a engrosar la nomina de alguna radio “pública” para hacer un programa plural, como es su deseo.
Más calentones.
Acabo de ver un anuncio de la Sexta preparando el partido del F.C.Barcelona-Real Madrid utilizando un humor negro que va a levantar la…, perdón, va a levantar ampollas. Un pavo, un gicho, conduce su automóvil, tiene un accidente pero no muere, de milagro, pues el día del, otra vez, partido del siglo no es un día para morir. No creo que nadie tenga previsto en su agenda vital esa fecha para conmemoraciones luctuosas, pero ya que lo proponen igual algún zumbaó decide llevarse por delante a parte de los ciento veinte mil espectadores del espectáculo y no precisamente con un accidente de tráfico. Por cierto mamón, se debe conducir con el cinturón de seguridad para no salir despedido del vehiculo. ¡La peña, es que no se entera!
Y por último, el calentón que a mi me preocupa es el del planeta.
No voy a entrar a hablar de la desertización, ni del deshielo de los glaciares, ni del aumento del nivel del mar que acabará con gran parte de las costas mundiales. No. Eso lo dejo para ecologistas y científicos cualificados. Yo vengo a hablar de mi libro, dicho con voz muy grave. Al estilo Umbral. Pues tampoco.
Me inquieta el cambio del mapa del vino. Que se pierdan zonas frías donde se dan vinos de calidad contrastada, como Alemania y sus Riesling que necesitan de temperaturas muy frías para que la uva alcance la maduración precisa, en beneficio de otros países muy fríos que se templaran lo justo para conseguir ese tipo de vinos. Que en las zonas mas calidas el exceso de calor no permita el desarrollo de la vid. Es decir el mapa vitivinícola se irá desplazando dentro de los países y de los continentes.
Es decir los vinos de Ribera se harán en el Bierzo o Valdeorras, y los de Rías Baixas en alguna plataforma petrolífera puesta para tal efecto. Creo que me he pasado de frenada.
El ejemplo que he leído en Elmundovino es más exacto. El eiswein ya no se elaborará en Alemania sino en algún país escandinavo, como Noruega. La Riesling perderá su feudo de Rheingau desplazándose al norte y los tintos de Pinot Noir franceses ocuparán su espacio. Puntualizan que la Merlot y la Cabernet Saugvignon salvarán al vino alemán. Y terminan diciendo, incluso, que Inglaterra será, en cincuenta años, una pujante región del vino rosado y rosè.
Yo no las tengo todas conmigo.
Buenas tardes y saludos cordiales.
Después de tragarme on line la entrevista que Jesús Quintero hizo a José María García y que nuestra televisión pública tuvo a bien censurar, no encuentro insultos para ello. Bueno si, veo que el nuevo Butanito, transformado y sumiso al poder, nombra con rencor al anterior presidente, al del bigote. Ataca a otro expresi, al del ¡Hala Madrí! Y se acuerda “mu malamente” de quienes fueron sus amigos y la empresa que le daba de comer. Es una forma de hablar por que ganando mil quinientos kilos de los de antes no se debe tener tiempo de eso y si de otras cosillas.
Me atrevería a apostar, con quien sea, que antes de las elecciones nos colocan esa entrevista de marras consiguiendo máximos de audiencia (para eso es todo este burdo montaje, y juro que no he leído, ni oído, nada al respecto. Es mi impresión personal que para eso me crearon con cerebro) y supergarcía pasa a engrosar la nomina de alguna radio “pública” para hacer un programa plural, como es su deseo.
Más calentones.
Acabo de ver un anuncio de la Sexta preparando el partido del F.C.Barcelona-Real Madrid utilizando un humor negro que va a levantar la…, perdón, va a levantar ampollas. Un pavo, un gicho, conduce su automóvil, tiene un accidente pero no muere, de milagro, pues el día del, otra vez, partido del siglo no es un día para morir. No creo que nadie tenga previsto en su agenda vital esa fecha para conmemoraciones luctuosas, pero ya que lo proponen igual algún zumbaó decide llevarse por delante a parte de los ciento veinte mil espectadores del espectáculo y no precisamente con un accidente de tráfico. Por cierto mamón, se debe conducir con el cinturón de seguridad para no salir despedido del vehiculo. ¡La peña, es que no se entera!
Y por último, el calentón que a mi me preocupa es el del planeta.
No voy a entrar a hablar de la desertización, ni del deshielo de los glaciares, ni del aumento del nivel del mar que acabará con gran parte de las costas mundiales. No. Eso lo dejo para ecologistas y científicos cualificados. Yo vengo a hablar de mi libro, dicho con voz muy grave. Al estilo Umbral. Pues tampoco.
Me inquieta el cambio del mapa del vino. Que se pierdan zonas frías donde se dan vinos de calidad contrastada, como Alemania y sus Riesling que necesitan de temperaturas muy frías para que la uva alcance la maduración precisa, en beneficio de otros países muy fríos que se templaran lo justo para conseguir ese tipo de vinos. Que en las zonas mas calidas el exceso de calor no permita el desarrollo de la vid. Es decir el mapa vitivinícola se irá desplazando dentro de los países y de los continentes.
Es decir los vinos de Ribera se harán en el Bierzo o Valdeorras, y los de Rías Baixas en alguna plataforma petrolífera puesta para tal efecto. Creo que me he pasado de frenada.
El ejemplo que he leído en Elmundovino es más exacto. El eiswein ya no se elaborará en Alemania sino en algún país escandinavo, como Noruega. La Riesling perderá su feudo de Rheingau desplazándose al norte y los tintos de Pinot Noir franceses ocuparán su espacio. Puntualizan que la Merlot y la Cabernet Saugvignon salvarán al vino alemán. Y terminan diciendo, incluso, que Inglaterra será, en cincuenta años, una pujante región del vino rosado y rosè.
Yo no las tengo todas conmigo.
Buenas tardes y saludos cordiales.