El pueblo de Laguardia precisa para su ayuntamiento, y oposición, gente con iniciativa, capaz de gestionar desinteresadamente con efectividad, garantía y firmeza los escasos recursos existentes. Personas cuyo egoísmo, egocentrismo, quede relegado por el esfuerzo personal y la dedicación sincera durante los próximos cuatro años.
Ese debería ser el principio básico de la política municipal y que parece haberse olvidado, o confundido, a tenor de la opinión silenciosa que circula por nuestras calles.
Brindemos, ¡por Laguardia!
3 comentarios:
Igual teníamos que hacer una acampada en la plaza para que el dinero de Laguardia se gastase en el pueblo y no se fuera en sueldos y dietas de la corporación municipal que, a mi entender, no los merece.
Pero, claro, de asuntos de dinero mejor no tratar... ni en los bares.
Y móviles, Mantible, y móviles, con sus respectivos consumos.
Pero, como bien dices, la pasta es la pasta.
Saludos.
Brindemos por Laguardia!
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