martes, junio 17, 2008

Drappier, La Guarda y otros amigos.



-¿Si hacemos esto un martes, que nos esperará el viernes?
Esta frase resume el espíritu de la reunión “Momentos Drappier” celebrada en el Hotel Castillo de Gorraiz Golf & Spa.
Organizado por Cella Vinarium y por Delgado Selección, importador de Drappier para España, este evento de carácter extraordinario consiguió el principal objetivo de acercar los vinos de esta casa de Urville (Francia) a todos los amigos que se acercaron hasta el escenario elegido. Lugar moderno, de singular belleza, con unas instalaciones apropiadas para sorprender, relajarse y enamorarse.
Hasta el tiempo nos concedió una tregua permitiendo que el sol brillara tanto como los champanes presentados en la terraza al aire libre desde la que se tiene una perspectiva única del campo de golf y de la urbanización, con el horizonte de Pamplona al fondo.
Previa a la cata, en el centro de Spa, se propuso un tratamiento preparatorio para recibir las burbujas en perfecto estado físico y emocional. Quien lo probó puede dar fe de su beneficioso efecto.
La maison Drappier se encuentra en plena Côte des Bar y su historia comienza en 1808.
Sus viñedos ocupan 75 hectáreas, la mayoría en Urville donde la reina es la Pinot Noir (70%), equilibrando ensamblajes con Chardonnay y Pinot Meunier. De Cramant llega la Chardonnay mientras que en la Montaña de Reims, de Bouzy y Ambonnay, vuelve a predominar la Pinot Noir.
Se puede destacar que todos los cuvées de la casa se elaboran con vino de primera prensada. Todas las operaciones de prensado, descubes, trasiegos,… se realizan por gravedad. Y consecuentemente de lo anterior, la adicción de azufre es mínima consiguiéndose vinos de gran finura.
Este fue el orden de cata que nos transportó al paraíso de las sensaciones:
Drappier Brut Carte D´Or.
90% Pinot Noir.
Bonito a la vista con reflejos cobrizos, dorados. Frutal, limpio y fino en nariz. Boca de buena frescura y recuerdos de frutos rojos y tostados.
Se degustó junto a Matrimonio de jamón ibérico y jamón de pato
Excelente comienzo.
Drappier Brut Nature Zéro Dosage.
100% Pinot Noir.
No se le añade licor de expedición.
Precioso color rosado pálido, coralino, brillante. Notas de fruta blanca, anisados y brioche. Manzana asada. Complejo. En boca es amplio, fresco y estructurado. Paso suave. Delicioso.
Con una Navaja a la gallega potenció sus elegantes sensaciones.
Drappier Blanc de Blancs Cuvée Signature
100% Chardonnay.
Oro pálido con reflejos verdosos. Sugerente. Nariz floral y avainillada. Notas cítricas. En boca sorprende su finura y su largura.
No armonizó pero sirvió para complementar una tapa de Bonito del Norte sobre reducción de vinagre de Jerez.
Drappier Millesime Canicule 2003.
Es un “Cuvée de Exception” que en este año toma nombre de la añada tan calida que fue la del 2003. Se vendimió el 25 de agosto, no ocurría algo semejante desde 1822.
Las uvas Pinot Noir (60%) y Chardonnay (40%) con que se elabora el vino son de las soleadas fincas que pertenecieron a los monjes Clairvaux.
Se vinifica parcialmente en barrica de roble.
En vista muestra reflejos ambarinos y notas confitadas. Es muy fresco y elegante.
Redondeó el paladar con unos sabrosísimos “Berberechos con agua de mar”. Tremendo el poder con el que persistían en el retrogusto.
Drappier Grande Sendree 2002.
55% Pinot Noir y 45% Chardonnay.
Uvas seleccionadas de las fincas más viejas. Se elabora solo en los mejores años. El degüelle se realiza a mano. Envejece un mínimo de seis años en las cavas de Reims.
Es un grandísimo representante de los mejores champanes franceses. Intenso, complejo y fragante en nariz. Elegante, sabroso y expresivo en boca. Y eso que tiene mucha vida por delante.
Sorprende la relación con “Anchoas del Cantábrico con huevo de codorniz”.
Drappier Rose Val des Demoiselles.
100% Pinot Noir.
Vinificación tradicional por sangrado y reposo en cavas más de dos años.
Bonito color rosa asalmonado intenso. Frutos rojos y frescura fantástica. Notas de cáscara de naranja. Amable y gustoso en boca.
Remató la faena junto a “Mi-cuit de pato con fresa fresca”. El dulce y el ácido, y las diferentes texturas hacían crecer los sabores y las sensaciones hasta límites increíbles. Recomendable.
Así, escondiéndose el sol y junto a las primeras gotas nos levantábamos tras dos divertidas y encantadoras horas junto a Drappier.
Agradecemos el esfuerzo de Delgado Selección, la especial atención de Hotel Castillo de Gorraiz Golf & Spa y la presencia de quienes invirtieron en felicidad parte de su tiempo.
La Guarda de Navarra recomienda el abuso de champanes, de buena compañía y de momentos para el recuerdo.
¡Cualquier excusa es buena para celebrar algo y dar gracias a Dios por esos pequeños ratos de disfrute!

3 comentarios:

El Vizcayno dijo...

Tienes toda la razón en tu párrafo final. Siempre es buen momento para celebrar algo, por ejemplo, la nueva edición de Iberoamérica en Cata.

IEC #11: Evocando los orígenes. Convocatoria

Saludos

Adictos a la Lujuria dijo...

Y nosotros de dieta.

Que envidia, como te cuidas.

Un saludo

La Guarda de Navarra dijo...

Vizcayno, por supuesto que celebraremos la 11ª edición de IEC.
Saludos.
Adictos, no te pases por que esas escapadas por el Priorato tampoco se quedan cortas. Tengo unas ganas terribles de visitar esa zona que tu tan bien conoces.
Saludicos.